martes, 26 de febrero de 2008

Los estorninos y el terremoto


Los estoninos son esos pájaros que durante todo el invierno vemos en nuestras ciudades, sobre todo al atardecer sobrevolando los cielos en grandes bandadas que se cruzan entre si y que se unen y desunen. El espectáculo, visto sobre todo desde la ventana de tu casa, suele ser hermoso, hay que reconocerlo. Pero cuando viver cerca de un parque la cosa ya pierde su gracia. Son ruidosos, tremendamente ruidosos y, dada la concentración de miles de ellos en unos pocos árboles, el resultado suele ser de los mas asqueroso y antihigiénico. Aquí, en A Coruña, se han convertido, como en otros muchos sitios, en una auténtica plaga. No nos llegaba con las palomas y las gaviotas, no, los estorninos rematan el espectáculo.
Todo en su justa medida tenemos que reconocer que resulta hasta bucólico. Es verdad. Unas cuantas palomas en un parque relajan hasta la vista. Contemplar a unas cuantas gaviotas cuando en los acantilados de S. Pedro de Nos (una zona de A Coruña capital), por ejemplo, aprovechan las corrientes de aire para aterrizar suavemente en las rocas, es un momento casi ensoñador. Una bandada de estorninos, solo una, resultaría hermosa de contemplar, con sus vueltas y reviravueltas.... Pero un montón exagerado de palomas en un parque lo dejan casi intransitable. Una colonia exageradamente crecida de gaviotas, llega a asustar, se vuelven agresivas, además de sucias, por supuesto. Y decenas de bandadas de estorninos surcando los cielos, impresiona y acongoja...
Pero las aves tienen también su misterio, por supuesto. Siempre se dijo que los animales son los mejores indicadores de que un terremoto se acerca. Y es verdad. Ayer lo comprobé, bueno, realmente lo comprobé hoy, que fue cuando me enteré de lo que pasó en definitiva.
Ayer me llamó mi prima desde Ferrol, sobre las 14 horas. Estaba ligeramente asustada. En el tejado enfrente de su casa, en un pequeño espacio, se juntaron hasta 32 estorninos (si, llegó a contarlos). Así en principio, no parecen muchos, pero cuando no es un sitio de ubicación normal para ellos, entonces ya son demasiados. Me decía que estaban quietos y como si estuvieran todos mirando para un mismo lado. En principio se pensó que eran cuervos, por lo negros que son, pero tantos cuervos juntos sí que sería una anormalidad total, por lo menos en una ciudad. Le quité importancia al hecho y le dije que seguro que era porque de A Coruña se está intentando alejarlos y a lo mejor estaban llegando mas a Ferrol....
Todo quedó ahí hasta esta mañana. Me volvió a llamar. "Ya se por qué estaban todos los pájaros juntos: hubo un terremoto"... Y era verdad, hubo un terremoto de 3,7º en el mar, a unos 10 Km. del cabo de Corrubedo, en la zona de Barbanza, hacia donde miraban todos los pájaros. Afectó a Santa Eugenia de Riveira, Porto de Son, A Pobra y Boiro, aunque en Boiro se notó ya con una magnitud de 2º.....
Pero lo asombroso no es ésto, lo asombroso, para mí, claro, es que el terremoto no tuvo lugar sobre las 14 horas, sino que fue exactamente a las 16,29 horas... Cuatro horas después de que los estorninos se agruparan.... Y resulta asombroso, porque según ésto, el margen de tiempo entre el "aviso" de las aves y el hecho en sí, es suficiente para ponerse en guardia.
Esta vez el movimiento no fue considerable, aún siendo el mayor registrado últimamente por los servicios de Sismología de la Península Ibérica, ¿pero qué pasaría si tan solo hubiera tenido dos grados mas de potencia? Mejor no pensarlo...
Por eso, estemos atentos a los animales que nos rodean. Nuestra raza, la humana, ha degenerado y perdido muchas facultades fundamentales para la supervivencia animal. Pero conservamos a nuestro lado a los mejores indicadores de estas catástrofes: las aves.
Los estorninos son una plaga, si, pero qué asombrosas capacidades tienen animales tan pequeños...